viernes, 31 de julio de 2015

MI MINI “SOPLAO”

Como estos días tenía a la “Nenina” en el taller y no había noticias de una ruta con mis compañeros de “asfalto”, decidí  “liarme la manta a la cabeza” y hacer una ruta que tenía en mente desde hace un tiempo.

Iría por la costa, subiría el Fito y vendría por el interior.
Imaginándomela, no parecía algo muy difícil, iría hasta Villaviciosa, Colunga, subiría hasta el Mirador del Fitu, bajada hasta Arriondas y luego ya “llanear”, Infiesto, Nava, Pola de Siero y el Alto de la Madera y ya está.

Antes de meterme en esta aventura, pregunté a Berto, uno de mis compañeros de “flaca”; ¿cuánto tardaré?, y su respuesta fue: “Yo tardé cinco horas, son unos 150 km.” Lo de las 5 horas pedaleando, ya me acojonó un poco, pero lo de los 150 km…..me acojonó más. Había que madrugar... -.-'

A las 9, hacía un día perfecto, sol, fresquito y poco tráfico.
¡¡¡VAMOS QUE NOS VAMOS!!!!

Como el lema de los Repechinos es “Nunca Pedalearás Solo”, en mi aventura me acompañaron mis incondicionales, Kañero ( el diablillo que llevo dentro y que me está “dando caña” cada poco), y Gelín ( es mi Angelín de la Guarda que me cuida y me hace de “conciencia” y que trata que no haga más locuras “de las habituales”).



Empezamos a pedalear y en un periquete llegamos a Arroes.

-Kañero:“ Willy, tenemos dos caracoles subiendo por la rueda trasera, a este paso no llegamos a casa ni para las campanadas de Nochevieja”

-Gelín: “Tú, tranki, Willy, que quedan aún muchas pedaladas hoy, vete disfrutando del paisaje”
Pis, pas y ya estábamos en Villaviciosa.

-Kañero:” ¡¡¡Qué ¡!!! ¿igual paramos a descansar y todo? Las excursiones del inserso son más rápidas que nosotros.

-Gelín:” Bien, Willy, buen ritmo, una hora y ya estamos haciendo unas fotos para el blog.

-Kañero:” A ver si eres más rápido haciendo las fotos que pedaleando, porque sinó, cuando escribas la crónica ya no van ni a existir los blogs...

Cuatro pedaladas más y ya pasábamos Colunga, unas fotos junto al “tiranosurius rex” (que no sé que me dio más miedo, si el dinosaurio o la “cuestina” que tenía que subir dentro de poco…)



-Kañero:” Bueno, menos mal que se acabó esta ruta de “globeros”, me salió barba desde que salimos, y a este ritmo cutre-salchichero, ya me tuve que afeitar tres veces, ahora empieza lo bueno ¡¡¡¡¡Caaaaaaaaña!!!!

-Gelín:” Tómatelo con calma Willy, que llevas cuatro días con la bici de carretera y quitando alguna “encerrona” que te prepararon Tino y Calo, nunca subiste una cuesta así”

-Kañero:”¿He, oído algo así como un COCORICO COCORICO? ¿Qué pasa Willy, que empiezas a sudar frío?

-Gelín:” Tú, ni caso, pon ya todo el desarrollo que tengas y sube tranquilín, recuerda, hay que empezar como un viejín pa acabar como un chavalín.”

-Kañero: ¿No se te ocurrirá, eh Willy?, Cagonrosss, tu yes un Repechín, no pongas el platu grande, pero por lo menos “dales calor a los piñones  pequeños”

Y así que empezamos a subir “los tres” hacia el alto, aunque el único que pedaleaba era yo.
Una paradina en el Mirador de los Picos de Europa (creo que se llama así al que está a los pies del Fito), y la vista no era muy alagueña ( o sí, porque la niebla que tapaba la cima me impedía ver lo que me quedaba).



En todas las rutas que hago, me voy acordando de algunos de mis compañeros.
Hoy me acordé de Turonman, sobre todo subiendo el Fitu, y sus palabras de “ tu tranquilo, que con el “casette” tienes de sobra pa andar por carretera, no hay cuestas duras, más o menos ye como el desarrollo de la bici de montaña” -¡¡¡¡¡JA!!!!,    ¡¡¡¡¡ja!!!!!  Y   ¡¡¡¡JA!!!!

También me acordé de Lynux, y que me dijo que para el Soplao se había llevado música de AC/DC, que eso te motivaba mucho en las subidas. Yo, llevé a La Cirigüeña, que ye música más asturiana y aunque no me motivaba mucho, fui riéndome media ruta.

Pin pan, pin pan, pin pan, sube, sube sube,

-Kañero:” ¿Qué pasa Willy?, fue la subida al Fitu de automovilismo la semana pasada y a esti pasu va a pillanos el coche cero de la próxima subida y todavía estamos aquí.”

-Gelín:” Bien, Willy, bien, llevas buen ritmo, vas bien, sigue así”

-Willy: “Ostia Gelín, que tamos empezando a subir y ya voy “con todo metido”, cuando llegue lo duro…. No sé yo…..

-Kañero: PIO PIO PIO, COCORICO COCORICO ,Si aparece un jubilau de estos de 80 años, 120 kilos con la bici que le regalaron en la comunión y nos adelanta, yo me bajo y no te conozco Willy.

-Gelín:” Tú vete regulando, ponte un ritmo y tranki.

-Kañero:” Si, regulando, pero a mí parezme que vas “empeorando”, menos mal que no te ve nadie. Quita el maillot de Repechín que lu estás arrastrando por la cuneta,y pon uno del carrefur.
Cada vez que levantaba la vista solo veía la carretera “encima de mí”, no había descansos, solo sube sube sube.

Llegamos a unas curvas muy cerradas y ya no había “mas piñones”.

-Kañero: No, no busques más piñones, que ya los acabaste al poco de dejar Colunga. Y ya tienes desgastada la maneta de tanto apretarla buscando el “molinillo” y a “San 36”. ¡¡¡¡¡LEVÁNTATE Y APRIETA LOS DIENTES Y TIRA PARRIBA!!!!!

-Gelín:” Si lo ves muy chungo, baja y descansa, ya seguirás luego, que no hay prisa”

-Kañero:” Como te marques un Andariegu en esta mierda de subida, escribo yo una crónica, y lo más guapo que te llamo ye Margaritu”.

-Willy:” Buf, esto ye un poco duro, y aún me parece que me falta un buen cachu de subida”

-Gelín:” Para un poco Willy, y dame de beber, que tengo sed”

-Kañero:” ¡¡¡Y una mierda!!!! Ya sabes que hay que salir de casa meau, cagau y bebidu, así que ya beberás mañana, o la semana que viene, o cuando llueva.”

Pasamos lo que creo que era una antigua cantera y no sé si ye que el sol ya pegaba de lo lindo y me había reblandecido el cerebro, pero empecé a ir mejor, ya hasta miraba el paisaje, y no solo el dibujo de mi rueda delantera.

-Gelín:” ¿Ves, Willy?, hay que ir de menos a más, ya lo tienes ahí.

-Kañero:” Sí, de menos a más, porque a peor no podías haber ido. Cuando empezamos a subir, vi un  polluelo de aguilucho salir del huevo en el nido, y ya volaba como un avión cuando llegamos a la mitad de la subida.”

Y así, mejorando a medida que subíamos llegamos al alto, lleno de turistas, como siempre, y que escuchando sus conversaciones, me quedo sorprendido ( también como siempre).



Una vez escuché a un niño que viendo a un xatín mamar, preguntaba a su madre que que hacía aquella vaca pequeña, y ante la explicación de su madre, el niño quedó con la boca abierta, porque ¡¡¡¡creía que la lleche salía de los tetrabrik!!!!.

No me lo podía creer lo que estaba escuchando, pero lo peor fue este año... Comiendo mi “pastelín” de “ganador” del Premio de la Montaña, una pareja de “sensentaytantos”, preguntaba un paisano que estaba allí, que si aquellas  vacas dormían en la calle y si no les venía nadie a poner algo como las mantas de los caballos para que no pasaran frío por la noche.

Yo creo que mis ojos salieron por encima de mis grandes gafas de sol, y no escupí la mitad del pastel que tenía en la boca, de milagro. ¿Era una broma? ¿preguntaban aquello de verdad? ¿Dónde estaba la cámara oculta?

Por más que miré, no ví la cámara, pero la respuesta del paisano, apoyado en su “guiyada”(vara larga de avellano que se usa para dirigir al ganado), no se hizo esperar:

-“¡¡¡¡¿ Que yé , oh? ¡!!!. ¿tapar les vaques?, eses nun se tapen, tan aquí en la gloria.
Y apoyándose en la barra, “pasó de los turistas” y siguió degustando la cervecina fresca que tenía enfrente y comentando “ tapar les vaques….. esta xente tan como cencerros”

-Kañero: Bueno, menos mal que llegamos arriba. Ya creía que los turistas que nos íbamos a encontrar eran los de la temporada de invierno.

-Gelín: ¿Ves Willy?, ya lo conseguiste. Hay que ir “despacito y con buena letra”.

-Willy: La verdad, chicos, es que como nunca había venido por aquí, me parecía una subida del copón, pero bueno, a mi ritmo, llegué.

Y así, tras “recuperar azúcar” y hacer unas fotos, empecé a bajar hacia Arriondas.
¡¡¡¡Vaya pasada!!!! Nunca estuve tanto tiempo bajando una cuesta, ¡¡¡Y sin dar pedales!!!!.
Esto del asfalto ye muy diferente al BTT. Por les caleyes, tardas en subir las trialeras, pero las bajadas, son un visto y no visto, en cuanto te descuidas, ya estás otra vez subiendo. Aquí, menuda bajada, a mí me pareció que había subido por lo menos dos mil metros, porque no llegaba nunca a Arriondas.

-Kañero: Bueno, menos mal que estamos bajando, aquí no lo haces muy mal, si nos viera algún conocido ya no pasaría mucha vergüenza.

-Gelín: Vete controlando y no hagas el cabra, haber si la liamos bajando y caes a un prau de estos y no te encuentran hasta septiembre.

Y así llegamos a Les Arriondes, visita al cañón y un vistacín al Sella, y vuelta para ir hasta Infiesto.

Las subidas duras ya se habían acabado, ahora solo era, como dice la canción “rodar y rodar, rodar y rodar”.

-Kañero: Willy, me estás desconcertando, ¿el pastelín que tomaste en el Fitu, tenía Epo? Porque estás rodando a un ritmo, que, porque estoy yo aquí, que si me lo cuentan, no me lo creo.

-Gelín: Bien, Willy, bien, no te ciegues, que hace mucho calor y aún queda un buen trecho.
Los kilómetros iban pasando, y el ritmo, yo creo que no era malo,(es más, para mí, que era hasta bueno).
 
Mi esperanza era encontrar algún otro ciclista para ir juntos y que la ruta se me hiciera un poco más amena, pero nada, ni un alma.

Como siempre, iba pensando en la crónica y riéndome yo solo, seguro que algún conductor que me vió, pensó que me había escapado de un psiquiátrico.

Villamayor, Infiesto, Nava…Y el sol que pegaba de lo lindo. Me quedo sin agua y la boca ya parece una alpargata, encuentro una fuente, ¡¡¡¡Salvado!!!.

Pero la alegría dura poco en la casa del pobre. Veo el cartel “Agua no potable”.



-Kañero: Va, por un poco que bebas no pasa nada, como mucho te entrará una “cagalitrosis” del 15, pero así bajas un poco la barriga.

-Gelín- Ni se te ocurra, pica en una casa y que te den un poco de agua, y sigues ruta.

-Willy: Bueno, ahí delante está la planta de agua de Fuensanta, ahí tendrán “ agua”, pero pensándolo mejor, tiro hasta Nava y me tomo un tentempié con una cervecina de las de “paisano”.



Resistiendo la tentación, (bueno, no hubo mucho que resistir, porque estaba cerrada), pasé delante de la confitería y paré un poco más adelante, en el Dayse, que tenía una terraza con muy buena pinta, y unos pinchos que estaban diciendo “cómeme cómeme”.

La sensación de llegar arriba al Fito, fue muy buena, pero la sensación de sentir la cervecina bajando por el “gaznate”, fue indescriptible.

-Kañero: ¿Qué, sacamos la tumbona?, No me digas que tas cansau, venga, tira palante, que se nos va hacer denoche.

-Gelín: Bueno, ya recuperaste un poco, ahora a seguir ruta.

Ahora, el camino ya era conocido, pero el “paisanín” iba un poco más cansado que otros días, pero la cosa pintaba bien. Enseguida, en la Pola, y nada, ni un ciclista por la cuneta.

Mis compañeros “los Joses”, llegaban a casa tras su Super Ruta, tras haber recorrido la Ruta de la Plata, con temperaturas de más de 30 grados. Esto si que era una ruta, y no lo que yo estaba haciendo, pero bueno, yo llego a lo que llego (al menos por ahora).

Me hubiera gustado haber llegado a tiempo al Berrón para acompañarlos en su llegada a Gijón, pero por mucho que me esforzara, no llegaría a cojerlos.

Y así, enfilamos ya hacia el Alto de la Madera, no sin antes parar en la fuente a coger agua, que el bidón debía tener un ahujero, o yo bebía más que un camello (que también  podía ser).
La verdad es que la subida no se me hizo más dura de lo habitual, no sé si porque me veía bien o porque veía que Gijón estaba a “cuatro pedaladas”.

-Kañero: Bueno, a ver si aprietas un poco el culo, y haces que te sobren un par de piñones en la subida, y si haces algo parecido a un sprint para llegar arriba, igual me callo ya hasta que lleguemos a casa.

-Gelín: ¡¡¡Grande Willy, Grande!!!!, ya lo tienes ahí, eres un crack.

Ya lo tenía ahí, ya tenía un “porrón” de kilómetros en el “cuenta”, más de los que había hecho nunca, y veía que podía “apretar” un poco más.

-Willy: ¡¡¡¡Ya está, ahora, ya a bajar y en casa!!!!! ¡¡¡¡Piscina, prepárate que vooooooooy!!!!!

Aquí, me acordé de otro de mis compañeros de aventuras Repechineras, de Yeloquehay.
El otro día, en la Vuelta al Concejo, comentábamos que aquello era para nosotros, nuestro “Mini Soplao Particular”, ya somos un poco “paisaninos”, otro año que habíamos acabado, y aunque ya peinamos alguna cana (pocas, eso sí), llegamos al final de la Vuelta, sin hacer “Andariegos”, y viendo a muchos “chavales” empujando sus bicis, nuestra moral se puso por las nubes.



Y por eso hoy titulé mi crónica el Mini Soplado, en este caso, era mi “mini soplado de carretera”.
Casi 150 km. Ni me lo creía, ya estaba pensando en mi siguiente “super ruta”.

-Kañero: No, si al final te vas a venir arriba y vas a creer que puedes seguir por ahí subiendo más puertos. Si lo haces, vete solo, para que no haya testigos de tu patético ritmo de ascenso en las subidas.

-Gelín: Tú ni caso a este cafre Willy, y a seguir entrenando a tu ritmo, y a buscar algún otro puerto para intentar subirlo.

-Willy: Bueno, si hubiera apretado un poco más, hubiera podido llegar primero, pero me doy por satisfecho.

Sprint para llegar al alto, y plato grande y piñón pequeño y ¡¡¡¡¡Fuego!!!!.Caña a tope hasta Mareo.
Creo que la sonrisa no se me quitó de la cara en toda la bajada, y me duró hasta llegar a Deva.
Entrenaré más y haber si un día el Pajares…..o la Cubilla……o……. cualquier otra de esas preciosas carreteras que tenemos en Asturias se nos ponen a tiro.

Un saludo a todos, y nos vemos pedaleando
WILLY





martes, 7 de julio de 2015

300 ESPARTANOS (Y 14 REPECHINOS)

Salían los primeros rayos de sol y ya “los 300” espartanos estaban reunidos en el poblado de Las Mestas, listos para la Madre de Todas las Batallas.




Una hora antes, en el cuartel general de los Repechinos en Pelayo, Turonman pasaba revista a los “afortunados” que darían “brillo y esplendor” al uniforme de los Repechinos.

Todos en fila, sus monturas a la derecha y la vista perdida en el horizonte.



Turonman, con las manos cruzadas en la espalda iba repasando a cada Repechín.

Pedro y Linux,
¡¡¡¡Señor, si señor!!!
 Bicis limpias y calzado impecable, ireis en primera línea de ataque.
¡¡¡Señor, si señor!!!!

Mani
¡¡¡Señor, si señor!!!
Confiamos en tu empanada para celebrar la victoria, así que a primera línea con Pedro.
¡¡¡Señor, si señor!!!

Trasmi y Piraguas
¡¡¡Señor, si señor!!!
A primera línea también, pero como os volváis a hacer un “simpa” (coméis y “simpa…rar” escapáis pa casa), vais a limpiar todas las bicis de los Repechinos durante el invierno, hasta que queden brillantes como la tuya, Trasmi, en cuanto ves que la cagó una mosca.
¡¡¡Señor, si señor!!!!

Piti
¡¡¡Señor, si señor ¡!!
Bici limpia, zapatos de diseño….tu a primera línea también, pero no te dejes ver mucho por cabeza de batalla, que con eses patukes que solo se libran de los pantalones largos en tres rutas al año, más pareces un representante del equipo de la Central Lechera que un Repechín.
Podías coger puntos de tu hermano, que parece que está soldando todo el día la playa nudista de Peñarrubia de lo negro que está.
-¡¡¡Señor, si señor!!!

Yeloqehay
¡¡¡Señor, si señor!!!
Bici, sucia, y maillot sin planchar, a retaguardia.
¡¡¡Señor, si señor!!!

Willy
¡¡¡Señor, si señor!!!
Gafas sucias y cubiertas a medio uso, a retaguardia
¡¡¡Señor, si señor!!!

Jandrín
¡¡¡Señor si señor!!!
Tú serás el encargado de que no pasen sed los Repechinos, ¿ya me entiendes, no?
¡¡¡Señor, si señor!!! Guiándome por las estrellas, no me quedará atrás ni un mesón donde podamos tomar “jugo de cebada” bien fresco. Los tengo todos apuntados en mis pergaminos secretos. Mataré antes de que un Repechín pase sed. Por cierto, tengo aquí en mi alforja unas pruebas de “birrus magníficus” que conseguí de contrabando, ¿queréis catarlas?
¡¡¡¡¿Qué me estas llamando borrachín?!!!
No, señor.
Bueno, tu irás de aguador, en tu caso, “cerveceador”, y que no me entere que a un Repechín le visita el Hombre del Mazo por falta de “líquidos”.
¡¡¡Señor, si señor ¡!!

Cortés
¡¡¡Señor, si señor!!!!
No estás curtido en batallas últimamente y traes el casco sucio y ese maillot parece un acordeón, a retaguardia.
Señor, si señor.

Barrancas
-Señor, si señor
-Tu vas a…..tú, mejor….., tú acompaña a…..
Bueno, tú serás nuestro “factor sorpresa”, vete mezclándote con los integrantes de los demás clanes de la batalla y si las cosas se ponen muy negras, ya te mandaré a buscar y recibirás nuevas órdenes, pero hay de ti como te vea o me digan que estás haciendo algún andariegu.
-¡¡¡Señor, si señor!!!

Y así, uno a uno, nuestros invencibles Repechinos se dirigieron al encuentro de los demás integrantes de la batalla.
Juanjo, “capitanus eléctricus”, era el encargado de guiar a todas las tribus bicicleteras reunidas en las Mestas.

-¡¡¡¡ Compañeros, hoy es el día que todos estábamos esperando. Llevamos un año esperando y hoy vamos a dar una batida de reconocimiento por todo el concejo.
Los partidarios del Lado Oscuro, han salido de las fronteras de la Tierra Media, y amenazan con asfaltar nuestras queridas caleyas y colonizarlas con sus “flacas”. Es eso lo que queréis?!!!


Todas las gargantas gritaron a la vez:

¡¡¡¡No, no, no ¡!!!

- Los Repechinos salieron hace unos días a controlar los alrededores de la ciudad, pero no encontraron grandes hostilidades. Nosotros patearemos todo el concejo y eliminaremos a los invasores. ¿Alguna duda?
-¡¡¡¡No!!!

-¿Alguien quiere abandonar?, ahora es el momento, en cuanto crucéis por el puente encima del Piles, ya no habrá vuelta atrás.

-¡¡¡¡No!!!

-Algunos no volveréis con vida. No volveréis a pisar vuestras caleyas favoritas ni a sudar en las trialeras ni a limpiar el barro de los desviadores y del cambio de vuestras monturas, pero si fuisteis honrados en vuestras salidas y no hicisteis muchos “andariegos”, ni fuisteis a ritmo de “globeros”, los dioses os recompensarán en el cielo con esa bici que siempre deseasteis y rutas infinitas día tras día. ¿Es esto lo que queréis?

-¡¡¡¡¡Si ¡!!!!

-Pues que los dioses os acompañen. Quiero daros las gracias a todos, es un orgullo contar con vosotros, hoy seré uno más de vosotros  en la batalla, estaré codo con codo con vosotros en la lucha, (aunque lo que nadie vio fue la sonrisa que se perfiló en su boca cuando de reojo miró a su nueva “montura”, y que le hizo pensar “jejejeje, si, uno más, jejejeje”). Protegeros del calor y…..tened cuidado ahí fuera. Ahora los jefes de cada uno de vuestros clanes os dirigirán unas últimas palabras.

Turonman se puso al frente de la compañía de los Black Repechinos y a voz en grito preguntó:
-¡¡¡¡¡¡¡Repechinos, ¿estáis listos para morir?!!!!
-¡¡¡Señor, si señor!!!!


Fue la voz que se escuchó desde el Molinón hasta San Pedro, a la vez que los Repechinos levantaban con su mano izquierda sus botes de bebida isotónica.

- Pues vuestros deseos os serán concedidos hoy. ¡¡¡¿Qué somos?!!!!
-¡¡¡¡REPECHINOS, UH, HA!!!
-¡¡¡¿Qué somos?!!!!
-¡¡¡¡¡REPECHINOS , UH,HA!!!!
- ¡¡¡¡AL ATAQUE……!!!!
-¡¡¡¡¡¡¡AHHHHHHHHHHHHHH!!!!!



Y así, casi arroyando a Dolo, que nos había venido a dar suerte, como siempre en cada una de nuestras aventuras y empujando al coche de cabeza de carreta, salieron los Repechinos que cruzaron el puente del Piles, sin ver más allá de su rueda delantera.

Reconocimos la zona de Santurio, desde donde Piti, mirando a su “humilde chabola”, pensaba….”tal vez no vuelva a dormir aquí nunca más…..” Desde la puerta, una figurita pequeña le gritaba con toda la fuerza que le daban sus pequeños pulmones.…


-¡¡¡Papi, ven pronto y quítame les ruedines pequeñes de la bici, que quiero bajar con mis amiguitos a tomar una Pepsicola hasta los Nogales, y con este peso “extra” me dejan atrás y no les puedo seguir el ritmo!!!

-Si, cariño, enseguida estoy de vuelta. Como un par de barritas y vuelvo.



Después el falso llano a la zona cercana a la Casa de la Radio estiró el grupo, y la bajada hasta la Bombilla y Caldones se hizo con calma. Las escaramuzas, iban haciendo estragos en algunos de los guerreros, pero el grupo no paraba, seguía con decisión. Cada vez más gente venía a la retaguardia, y ya casi no había sitio para todos, así que en la subida al Picu del Sol, decidimos buscar “grupos menos concurridos” y tiramos un poco para adelante.


 El reagrupamiento hizo que se empezaran ya a contar algunas “bajas”, que venían empujando sus monturas, pero que tras la ingesta de las viandas que los jefes nos tenían preparadas, hicieron milagros en los fieros guerreros y enseguida seguimos ruta.

Ni qué decir tiene que el  “jugo de cebada” que nuestro “rastreador” Jandrín nos tenía preparado, nos hizo recuperarnos antes que el resto. La opinión generalizada de los Repechinos era que Jandrín era único.
¡¡¡¡30 grados a la sombra, los botes de bebida isotónica hirviendo, y nosotros ¡¡¡¡con cerveza fría!!!!!
 


-¡¡¡¡Repechinos, tres hurras por Jandrín!!!!

- ¡¡¡Hip Hip Hurra, Hip Hip Hurra, Hip Hip Hurra!!!

 
A pocos metros de allí, la montura negra del lider, Juanjo, brillaba en lo más alto del promontorio junto al mirador.

Desde allí, miraba al infinito y más allá. Pensaba donde podrían estar ocultos los guerreros del Lado Oscuro. En qué valle, junto a qué poblado, tras qué grupo de árboles, para ir a por ellos sin piedad.

La decisión estaba tomada, iríamos hacia Peñaferruz.

Cientos de preciosos caminos, y duras trialeras, llenaban de cadáveres las cunetas, pero el grupo no paraba, adelante, siempre adelante.



Y así, en un visto y no visto, estábamos con el campamento montado y listos para recuperar parte de las energías gastadas.



El calor era asfixiante, pero el esfuerzo de llegar pronto, se vio recompensado en forma de sombra que nos dio media vida. Algunos hasta tuvimos un poco de tiempo para “mirar hacia adentro”, pero cuando empezamos a roncar, las protestas se generalizaron y tuvimos que ponernos en pié para seguir.


Otra subida, una pequeña bajada, otra subidita y estábamos cerca de la casa de veraneo del romano Veranius.

Ni rastro del enemigo, pero…..tal vez estuviera en la zona alta, así que sin pensarlo dos veces, a coronar y patear los riscos cercanos.

Nada, como si se los hubiera tragado la tierra.

Nuevo reagrupamiento en la zona de Serín y un rumor corrió como la pólvora en el grupo.
La “mano derecha” del jefe “capitanus electrices” Juanjo, Rubén Patricio en uno de sus reconocimientos de la zona, a lomos de su fiel montura “Nissan”, creía haber visto movimentos hostiles en la zona del Monte Areo.



No había tiempo que perder, había que atacar por donde menos lo esperaban, y eso implicaba subir un “falso llano” importante, que nos llevaría a lo alto de Areo. Así, que a encomendarse a San 36 y ¡¡¡¡¡Al ataqueeeee!!!



Arriba, arriba, arriba, los “cuartos delanteros” de nuestras monturas querían perder contacto con el suelo, y la cuesta parecía no acabarse nunca o terminar a las puertas del mismísimo Cielo.


Aquí, ya las fuerzas estaban muy justas, pero sin dar un paso atrás y tras dejar la zona “limpia de enemigos”, nos dirigimos al reagrupamiento final en la báscula de Veriña, pero antes, tras el camino estrecho que nos llevaría al asfalto, una voz se escuchó a lo lejos:

-¡¡¡¡Arriba, arriba, están escondidos arriba!!!!

Y sin pensarlo dos veces, en el cruce del avituallamiento de los Peregrinos del Camino de Santiago, enfilamos nuevamente el “falso llano”, clavamos espuelas a nuestras monturas, y en un pispas estábamos dando vistas a la cementera y bajando hacia la antigua perrera.

Los pocos grupos de enemigos, corrían ya cercanos a Luanco, y seguro que no pararían hasta llegar a Lugo.

“Capitanus Electricus”, con muy buen criterio, ordenó que los pocos valientes que ya, más que llevar ellos a sus monturas, eran éstas las que los llevaban a ellos, tomaran un atajo para llegar al punto de reunión, donde ya todos juntos celebramos el fin de la dura batalla.

El que más y el que menos hizo lo que pudo, y haber llegado allí con vida ya era todo un triunfo.
Juanjo, tomó nuevamente la palabra:

¡¡¡¡Españoles, me llena de orgullo y satisfacción, dirigiros estas palabras en un día tan señalado!!!!

Al escuchar este estribillo, algunos guerreros de los que ya peinaban canas, se les erizaron los pelos como escarpias, y levantaron sus cabezas a ver quién era el pronunciaba el discurso.

-¿Las brujas y los demonios nos han hecho viajar en el tiempo? ¿Está otra vez Pachín al mando de la tropa?

- ¿Pachín?, ¿Quién ye Pachín? Preguntó un bisoño soldado. Y ¿Porqué aquellos guerreros se están tirando a esconderse en el monte?

-¡¡¡Ehhh, volved, que ye una falsa alarma, que ye Juanjo el que está hablando, volver aquí, que no pasa nada!!!

Y así, ya todos en perfecta formación llegamos nuevamente a Las Mestas, donde nos esperaba el premio habitual tras las batallas Repechineras, y no era otra cosa que la empanada y cervezas con que Mani nos tiene acostumbrados a celebrar que todos hemos vuelto sanos y salvos.

Turonman, tomó la palabra, y todos nos pusimos firmes.

-Repechinos, hemos peleado, hemos luchado, y lo hemos hecho bien. Hemos tenido problemas, pero mínimos, Lynux anduvo media ruta con la rueda trasera frenada, pero eso no es problema para un Repechín, se sube un piñón y aprieta más el culo, pero no pierde al grupo, y yo tenía la rueda trasera que bailaba más que el ombligo de la Shakira, pero no pasa nada, se pedalea de pié y se descarga peso del eje trasero, pero se sigue la ruta.
 
 El Capitán Chema nos ha trasladado las felicitaciones personales del jefe Juanjo,
(y de paso nos ha marchado con media empanada y una caja de cervezas), pero esto no es importante, lo que importa es que el uniforme Repechín sigue brillando en todas las caleyas y eso solo se consigue de una manera, ¿sabéis cual es?




¡¡¡¡Señor, si señor!!!!
¿Cuál?
¡¡¡¡Estando mañana a las 9 en Pelayo, Señor!!!
Pues que así sea, ahora podéis ir de cena, a emborracharos o a dormir la mona, pero el que llegue tarde mañana……
¡¡¡¡Repechinos, rompan filas ¡!!!!

 
Y así terminó esta batalla, en la que el concejo de Gijón quedó limpia de seguidores del Lado Oscuro, pero …….¿hasta cuándo?, No os preocupéis, mientras los Repechinos sigan patrullando las caleyas, siempre tendréis un buen “falso llano” que llevaros a las ruedas.


Nos vemos en la próxima batalla, ¿tienes preparadas tus armas?.




Un saludo a todos
WILLY