viernes, 27 de octubre de 2023

LOS REPECHINOS EN EL CAMINO DE SANTIAGO (Episodio 1, Temporada 3ª)

 

Los días pasaban plácidos en la República Independiente de la Caleya. El sol brillaba (rondando los 40º y no había Dios que durmiera por las noches), los pajarillos cantaban (y no dejaban dormir los jodidos palomos), la gente seguía con sus trabajos habituales (casi todos hasta los “cataplines” de mil horas de curro y de aguantar a sus jefes sin poder llegar a fin de mes), las tiendas seguían con sus ventas (las fruterías tenían ya más vigilantes de seguridad que las joyerías), y los informáticos seguían su día a día ( nadie sabía cuál era su trabajo en concreto, más allá de buscar nombres como “comunitymanagerceo influencersocialcoach”, los ancianos de la aldea, volvían a quitar las telarañas a las fesorias y a poner al día sus huertas de las que sacaban hortalizas más valiosas que el carbono de sus cuadros de bici o los cambios electrónicos más top.

¿Todo estaba tranquilo?, No!!!!!!

La aldea de los Repechinos hervía de actividad.

Se acercaban las elecciones a alcalde de la aldea y a responsables de su comunidad.

Por un lado, estaba el grupín del PP (Pedaleantes Pachangueros), que intentaban recoger votos volviendo a las rutas de “cachondeo y cervecita”, eso sí, siempre por las caleyas del país, nada de ir a caminos y trialeras de fuera. Sus votantes eran gente de “aquíhaynivelmaribel¨”, nada de equipaciones del chino.

Otro grupo importante en la aldea, eran los del PSOE ( Pedalearemos Solamente Objetos  Electrificados ), gente que en un principio estaban con los “currantes de la trialera” , pero que ahora prometían e-bikes a todos y luz gratis para cargarlas a quienes les votaran y que llevaban gobernando la aldea una gran temporada, gracias a su alianza con los de PODEMOS ( Pedaladas Organizadas Desde Equipos Mangantes Ociosos Siempre) , una nueva fuerza emergente que venían de las bicis de barra central y frenos de varilla, pero que se “acostumbraron” pronto ( o muy pronto) a la fibra de carbono, a los cambios electrónicos a las “casitas unifamiliares”.

A estas elecciones, nuevos candidatos habían aparecido para luchar por su parte del pastel (o del barro de la caleya) de las caleyas, como

 SUMAR (Somos Unos Margaritos Arrastrándonos Ruteando), y también un nuevo grupo, VOX (que tomaban su nombre del latín VOZ (“Vamos Ostiar Zoquetes”), que potenciaba las caleyas de la zona, echando a los foriatos fuera de los límites del concejo.

La guerra estaba desatada, mientras unos querían asfaltar las caleyas cercanas a la aldea con los dineros que venían de Europa, otros apostaban por potenciar las trialeras locales, vendiéndolas como las mejores del país, otros apostaban por hacer carriles bici por el monte para “hacer más inclusivo el deporte de la biela” y hacer que todo el mundo pudiera ir al Fariu con su bici eléctrica o su patinete y hacerse la foto como si hubiera subido al Himalaya sin oxígeno, otros prometían categorías “a la carta” en las pruebas ciclistas, podías apuntarte en el grupo de los masculinos, o de femeninas, o flows, queers, fluidos, bigeneros, pangéneros, sin géneros……

Y así, en estas estábamos cuando en la chabola de Piti Electrovoltix se organizó una reunión de los Repechinos, donde más de uno “apretó el culito” cuando nos salieron a recibir sus “perritos de compañía”, Dentelladix y Mandíbulix.

 


 

Fermín Amasamichelinix, Willy Maletainquietix, Carlos Lineatorcidix y Jose Manuel Impresorix deliberaban que nueva aventura podían realizar este año.

Lineatorcidix decía que la mejor ruta en “calidad-precio” era subir cuatro veces cada día el “falso llano “de la “Mecaguenrros” y así en una semana ya teníamos en el Strava un montón de Kudos. Ruta desechada por estar muy cerca de casa y por repetitiva.

Electrovoltix proponía ir a un “jumping park”, a dar vueltas y saltos a ver si las ruedas que había comprado en el “mercado asiático” resistían más que las del año pasado a los saltos.

Esta ruta fue desechada también por los saltos y  por no tener bastantes vendas y escayolas en la aldea para llevar para Impresorix-

Maletainquietix proponía cruzar los Pirineos, ir la Selva Negra, bajar por Suiza, Girar a la derecha en Roma y volver cruzando el Atlas marroquí. Ruta también desechada por ser muy larga y al ritmo que rodarían nuestros amigos, necesitarían coger un año sabático o dos.

Menos mal que había una cabeza “un poco cuerda” en el grupo, la de Impresorix, que propuso llegar hasta Finisterre, o sea, hasta el final de la tierra.

Amasamichelinix , pensando que el final de la tierra era el horizonte, protestó un poco, pues dijo que él veía donde se acababa la tierra todos los días al asomarse por la ventana y que eso estaba muy cerca, que la ruta, iríamos y estaríamos en casa a la hora de comer.

A lo que el “estudiado” del grupo, Lineatorcidix le reprochó su “ausencia reiterada” a los días de clase en el colegio, y que el horizonte no era el fin de la tierra, y, sobre todo, que la tierra no era plana y que no se acababa al llegar al horizonte.

No muy convencido, Amasamichelinix dio la razón a Lineatorcidix, a regañadientes, aunque todos podían leer en su cabeza lo que estaba pensando……”si, seguro que al llegar al horizonte vemos otro horizonte y luego otro y otro y otro……qué sabrá este “licenciado” si fue a escuela de pago hasta que lo descubrieron y lo expulsaron por no pagar “.

Y así Lineatorcidix convenció al resto del grupo para retomar la ruta, “como decía Fray Lewis of the Leon…. “Donde la dejamos ayer…”.

Así que, tras consultar con los espíritus, ver la alineación de las estrellas y los planetas, consultar al brujo de la tribu, y sobre todo y lo más importante, ver cuando le venía bien la ruta a Cova Termomixix y si se veía con ganas de aguantar unos cuantos días a ese puñado de “guajes”, decidieron retomar el Camino de Santiago hasta llegar a abrazar al Santo Patrón y después, “un par de pedaladas más” y llegar al famoso Finis-terrae, o el final de la Tierra. Después de llegar allí, ya  no había nada más, el fin, el acabose, el nada, el……… ¡Hostia, que no hay nada, que ya se terminó el mundo, no os enteráis o qué?!!

Dicho y hecho, se preparó el carromato-diligencia de Cova-Termomixix , se llenó de comida y cervezas, (y pepe-colas, para el estómago finolis de Impresorix), bicicletas, repuestos, ropa, planos, brújulas, sextantes, mantas, y mil cosas más, y …VAMOS QUE NOS VAMOS!!!!!!.

 







Para no tener que madrugar mucho, Termomixi y  Maletainquietix comenzaron ruta el día anterior a comenzar la ruta y se fueron a Finisterrae, para esperar a Electrovoltix y juntos ya ir a buscar al resto del grupo para empezar la aventura.


 

Todo iba bien hasta que llegaron al punto de reunión que había elegido Amasamichelinix.

El carromato no cabía por las estrechas calles del poblado y casi hay que demoler unas esquinas de casas y algunos tejados.

Tira pa adelante, sale para aquí, para un poco…. y tras varias paradas para enjuagar los gaznates con el jugo fresco y fermentado del lúpulo, pudieron nuestros amigos salir de la encerrona del gepesin y cenar ya tranquilos e irse a descansar, que mañana la ruta comenzaba “con algún falso llano”.




 

Vigo de Sanabria y un paseín muy chulo junto al rio, nos llevó casi sin darle a la biela, hasta Puebla de Sanabria donde vimos su famoso castillo, pero desde lejos, que la ruta de hoy no era cultural, y enseguida la ruta cambió. 



 

La sombra de los árboles desapareció, los caminos se volvieron asfalto y la ruta se puso bastante “pindia”, pero muy muy muy “pindia” y para rematar, el sol reblandecía (más si cabe) los pequeños cerebros de nuestros amigos. Sube, sube y requetesube. Lo único que se veía en el horizonte era una pared de tierra y árboles y parecía no tener fin. Electrovoltix y Lineatorcidix abrían la marcha, Maletainquietix iba en tierra de nadie pensando en…. en nada, como siempre, y Amasamichelinix preguntaba sin cesar a Impresorix cuanto faltaba para comer.

“¿falta mucho?, tengo hambre, hace media hora que no como nada, me va a dar un bajón de glucosa, ¿se acordará Termomixis del punto de encuentro para comer?, ¿la llamaremos por si acaso?”

Como la subida era larga, Impresorix llegó a dominar su mente e instalarse en un “momento Zen” y no escuchar a Amasamichelinix, y en vez de escuchar su charla, solo escuchaba el trinar de los pajarillos y el cantar de las cigarras, y mientras tanto, pensaba y miraba su gepesin……” en 150 metros, viene curva a la derecha, 15% de desnivel, bache central de 6 centímetros de profundidad y algo de gravilla suelta, así que ojo al dato”.

Y así, “casi casi” sin darse cuenta, nuestros amigos estaban en el alto del puerto del Padornelo.


Maletainquietix se las prometía muy felices pensando que ya era “todo para abajo”, Impresorix seguía ojeando el GPS para ver si había curvas peligrosas en el descenso o se lanzaba a “tumba abierta”, Amasamichelinix calculaba tiempo para llegar a comer, y Tiralinix y Electrovoltix como siempre, contemplando el paisaje y esperando cada dos por tres al grupo de los “panchos”.

Y de repente, Amasamichelinix, pegó un sprint que ni Perico Delgado.

El resto pensamos que el sol le había resecado el coco, pero no, al oír sus gritos, sabíamos la causa.

-¡¡¡¡¡¡ AQUÍ, AQUÍ, TERMOMIXIX ESTÁ AQUÍ, ESTAMOS SALVADOS¡!!!!!

Y en efecto, el carromato de la “pitanza” estaba en el pueblo de Lubián, bajo unos árboles, esperando a los “esforzados de la ruta” para saciar su apetito.

Un barril de jugo de lúpulo, media ternera, dos jabalíes, un jamón (de un tal Pepelito), seis melones y ocho kilos de plátanos y manzanas fueron el “tentempié ligero” que se metieron nuestros amigos entre pecho y espalda.



 

Después, café, chupito y …….


 A rodar¡!!!!!!

Con las pilas cargadas, el siguiente puerto A Canda, les pareció un falso llano.

Allí a Impresorix le cambió la cara, dejábamos “cazurrandia” para entrar en “Gallaecia”, ósea, que ya lo veía como rodar por el pasillo de su casa.

-Guardar los pasaportes chavales, que aquí ya tengo yo “contactos” (dijo Impresorix).

- ¿Puedes conseguir un container de pulpo y un tractor de cachelos para picar algo antes de la cena ¿(preguntaba Amasamichelinix)




Y para alegría de Maletainquietix A Gudiña estaba en el horizonte (lo que no quiere decir que cerca)

El fin de la primera etapa se acercaba, y los bares y restaurantes de la zona se frotaban las manos ante las noticias de que los Repechinos estaban al llegar y preparaban sus barriles de cerveza y sus mejores costillares para servirlos en una de las famosas “OCFR” de los Repechinos (Opípara Cena de Fin de Ruta).

 

Video completo aquí


 By Willy